¿Qué es la presbicia y por qué se relaciona con la edad?
Si tienes mas de 40 años y te cuesta trabajo leer de cerca, es probable que padezcas presbicia, problema visual que afecta al 50% de personas a partir de esa edad.
La presbicia, comúnmente conocida como vista cansada, es un trastorno ocular que se produce debido al deterioro gradual de la capacidad del cristalino para cambiar de forma, lo que dificulta el enfoque de objetos cercanos.
Por lo general, se manifiesta alrededor de los 40 años y progresa con el tiempo, afectando la calidad de vida de quienes la padecen.
Los síntomas de la presbicia incluyen dificultad para leer textos pequeños, necesidad de alejar los objetos para ver con claridad y fatiga visual después de actividades cercanas prolongadas.
Aunque no se puede prevenir, existen medidas para mitigar sus efectos, como el uso de anteojos con lentes progresivas, lentes de contacto multifocales o cirugía refractiva.
La presbicia no solo afecta la capacidad visual, sino que también puede influir en las actividades diarias y la calidad del trabajo. Por ello, es importante realizar revisiones oculares periódicas y buscar la corrección adecuada para mantener una buena salud visual y una óptima calidad de vida.
No todas las personas son aptas para tratar la presbicia con cirugía, en caso de que el médico considere que es una opción viale, hay distintos tipos:
- Cirugía de lentes intraoculares multifocales: Durante este procedimiento, se implantan lentes intraoculares especiales que tienen diferentes zonas de enfoque para corregir la visión tanto de cerca como de lejos.
- Cirugía de lentes intraoculares acomodativos: Estos lentes están diseñados para imitar la capacidad natural del ojo de cambiar su enfoque para ver objetos cercanos y distantes. La cirugía consiste en reemplazar el lente natural del ojo con un lente intraocular acomodativo.
- Cirugía de LASIK monovision: En este procedimiento, se utiliza el láser para corregir la visión de uno de los ojos para ver de cerca y el otro ojo para ver de lejos.
- Cirugía de queratoplastia conductiva (CK): Esta técnica utiliza energía de radiofrecuencia para cambiar la forma de la córnea y aumentar la capacidad del ojo para enfocar objetos cercanos.