Astenia invernal, el desgane por el frío

Astenia invernal, el desgane por el frío

Ya estamos en invierno, hace frío y a muchos nos dan ganas de quedarnos en cama y nos sentimos con baja energía. Si de unos días para acá te sientes con poca vitalidad, es probable que se trate de astenia invernal, pero no te preocupes, pues tiene una explicación biológica.

Durante esta época del año los días son más cortos, esto es porque hay menos horas de luz, y disminuye la temperatura, todos los seres vivos se adaptan a esos cambios; en las plantas y los animales se reduce el desgaste de energía, y algunos mamíferos incluso hibernan para recargar pilas para la actividad primaveral. En el caso de los seres humanos se altera la segregación de hormonas, lo que produce la necesidad de mayor descanso.

El problema surge cuando necesitamos ese descanso, pero nos exigimos más actividad y eso nos frustra, por lo que andamos irritables, estresados o deprimidos. Aunque es temporal, existen alternativas para sentirnos más motivados y disfrutar esta época. Te compartimos algunas ideas:

• Toma vitamina D. Generalmente el sol nos proporciona esta vitamina y, ya que en invierno no tenemos la suficiente, te sugerimos buscar un suplemento. También la encuentras en los pescados, el huevo y el aguacate.
• Realiza al menos 30 minutos de ejercicio al día. Si tienes oportunidad de salir a caminar o dar un paseo al aire libre durante ese ratito en que hay sol, seguramente mejorará tu estado de ánimo, ejercitarte aumenta tus niveles endorfinas y serotonina.
• Aliméntate de forma equilibrada.
• Programa las actividades que exigen más esfuerzo físico y mental durante las horas de luz natural, y deja para más tarde las actividades que demandan menor energía o las de disfrute.
• Cúbrete bien y haz planes en compañía de tus personas favoritas, desde ir por un café y platicar hasta acudir al cine pueden sacarte del letargo.
• Escucha música que te guste, pues estimula la actividad cerebral y mejora el estado de ánimo.

Recuerda que lo más importante es escuchar a nuestro cuerpo, después de todo, no está tan mal descansar un poco más para recuperar nuestra energía, reunirnos a tomar bebidas calientes mientras platicamos con buenos amigos o acostarnos a ver una buena película, ¿no crees?