El Instituto Nacional de Geriatría llama a no discriminar a las personas adultas mayores
El vejismo se basa en estereotipos negativos y perjudiciales sobre el envejecimiento
El INGER celebra su onceavo aniversario
El Instituto Nacional de Geriatría (INGER) llamó a reconocer y desafiar el edadismo, que consiste en la discriminación por edad o prejuicio generacional, especialmente aquella que padecen las personas adultas mayores, también conocida como viejismo.
En el marco de su aniversario número 11, el INGER señaló que el viejismo se basa en estereotipos negativos y perjudiciales sobre el envejecimiento y perpetúa la idea de que las personas mayores son menos valiosas, menos capaces o menos dignas de respeto y consideración.
Apuntó que este problema se manifiesta de varias maneras en la sociedad, siendo las más comunes la discriminación laboral, los estereotipos negativos, la discriminación en la atención médica y la exclusión social.
El Instituto detalló que las personas mayores no logran encontrar trabajo o no pueden mantenerse en el mercado laboral, son consideradas menos productivas, menos adaptables a la tecnología o más propensas a tener problemas de salud, lo que resulta en una exclusión o falta de oportunidades de empleo.
Además, existen estereotipos comunes asociados con la vejez, como la fragilidad, la dependencia, la incapacidad o la pérdida de capacidad cognitiva, que contribuyen a la marginalización y a tratos condescendientes hacia las personas mayores, limitando su autonomía y su participación activa en la sociedad.
Al mismo tiempo, las personas mayores pueden enfrentar barreras para acceder a servicios de salud adecuados. A veces, se les subestima o se les niega el acceso a tratamientos o procedimientos médicos basándose únicamente en su edad, en lugar de evaluar sus necesidades y condiciones individuales
Por último, apuntó que la vejez puede estar asociada con la exclusión social y la soledad. Las personas mayores pueden experimentar una disminución en las interacciones sociales, la participación comunitaria y el acceso a actividades recreativas, lo que puede afectar negativamente su bienestar emocional y mental.
El INGER destacó la importancia de cuestionar los estereotipos negativos, fomentar la participación activa de las personas mayores en la toma de decisiones y asegurar que tengan igualdad de oportunidades en todos los aspectos de la vida.
El Instituto Nacional de Geriatría compartió una publicación con motivo de su onceavo aniversario, en la que manifestó su compromiso de seguir promoviendo la enseñanza e investigación en el campo de la geriatría, para contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas adultas mayores y enfrentar los desafíos que plantea el envejecimiento poblacional.